COMPARTIR. «Acción de distribuir, repartir o dividir algo en varias partes, permitiendo el disfrute de un determinado recurso o espacio». Todos sabemos lo que significa, desde que nacemos nos enseñan a compartir, es una cualidad esencial del ser humano, desde la propia creación del mismo. compartimos estudios, trabajo, ropa, transporte… Pero ¿por qué no compartimos los espacios? o mejor aun, ¿por qué no compartimos nuestras viviendas?
BIENVENIDOS ALNUEVO HABITAR: LA VIVIENDA COLECTIVA, EL HABITAR COMPARTIDO.
Partiendo de esta idea, se ha desarrollado un proyecto de reforma de una vivienda colectiva tradicional conformada por 4 apartamentos, en un nuevo concepto de vivienda colectiva, con el uso y disfrute de una mayor parte de zonas comunes compartidas entre todos sus futuros habitantes. La idea trata de evolucionar la vivienda tradicional y crear amplias zonas comunes colectivas, impulsando la habitabilidad en mancomunidad, creando espacios de todos y para todos. De este modo, se han reducid o los espacios privados, destinados únicamente para las necesidades privadas de cada residente. Mientras que el resto de ambientes se han diseñado para el uso de todos los ocupantes del edificio.
Por ello, la diferencia entre una vivienda colectiva tradicional y la vivienda colectiva en Arespalditza es más que evidente.
De este modo se reducen los gastos comunes, repartidos a partes iguales entre cada vecino, y se pasa de ser propietario de una superficie de 70-80m2 (vivienda estándar tradicional) a ser copropietario de una gran superficie entorno a los 400m2, sin renunciar a un espacio privado mayor a los 20m2. Además, se reduce el elevado precio de la vivienda, puesto que todas las zonas comunes serán compartidas entre todos los convecinos. Así se consigue dar salida a toda esa juventud emprendedora, a esos soñadores que sueñan con poder volar algún día de sus nidos y aterrizar en un nido propio, asequible a sus recursos.
AD estudio 
